jueves, 31 de mayo de 2012

MAC VS WINDOWS


Los “maqueros” siempre presumen de ser usuarios de un sistema operativo estable, seguro, de buen rendimiento y agradable visualmente, y suelen presumir de ser una especie de “élite” frente a los usuarios de Windows, por la mala fama que tiene de estabilidad y seguridad (frente a virus, troyanos y otras amenazas). Lo cierto es que yo hace años (quizás más de 10, desde los tiempos de Windows 95 y Me) que no veo una de las famosas pantallas azules de Windows, y el anterior ordenador que tuve, con Windows Vista (otro con muy mala fama) jamás se me colgó. Curiosamente en mi visita a la Ciudad de las Artes y las Ciencias en Valencia, la mayoría de los Mac que estaban a “disposición” de los visitantes, estaban más colgados que un salchichón. La historia es que cada uno cuenta la película como la ve, y no hay que hacer mucho caso a los integristas que defienden con más corazón que razón un sistema, cuando no han probado a conciencia el otro.

Últimamente he estado utilizando el famoso Mac OS X 10.6 “Snow Leopard”, según Apple, el sistema operativo más avanzado del mundo. Ciertamente es un sistema rápido, estable, aparentemente seguro y muy agradable visualmente. Pero todo hay que decirlo, las aplicaciones se cuelgan como con cualquier sistema, nada es infalible (ya lo he sufrido varias veces).

Una de las pegas más grandes que veo al Mac es la dependencia extrema del ratón, si bien es cierto que hay multitud de teclas rápidas para agilizar el trabajo (10 dedos son más productivos que 1 que usamos con el ratón), en Mac hay muchas cosas que ¡sólo se pueden hacer con el ratón! (por ejemplo, mover un archivo o carpeta, increíble pero cierto). Y es que el hacer un entorno tan visualmente agradable, tiene su coste… y aunque no tendría por qué, así es en Mac.

Lo peor del Mac es su sencillez. Puede parecer una contradicción, pero claro, si quieres hacer algo sencillo, no puedes dar muchas opciones al usuario (ya se sabe, el usuario es tonto, y la va a liar). Así pues, en el Finder (el equivalente al explorador de Windows en Mac), no puedes organizarte las columnas de cualquier manera (sólo permite algunas combinaciones), tampoco hay barra de la ruta en la que te encuentras, así que no puedes escribir para ir a un sitio concreto. Finder tampoco está bien integrado con las aplicaciones, porque si desde una aplicación pretendes buscar un archivo (por ejemplo, una imagen para incluír en una canción en iTunes), no tienes las opciones que sí tienes con el Finder como navegador (vistas en miniatura, detalles, etc.).

Finder, bajo mi punto de vista, es el que sale peor parado en la comparación con Windows, pero la gestión de la papelera también me parece pésima. En un sistema que presume de sencillez, no he sabido configurar el límite de espacio para la papelera (tal vez tampoco ésto se pueda), tampoco he sabido eliminar un archivo sin pasar por la papelera, ni eliminar un único archivo de la papelera (sólo veo opción a vaciarla completamente), y para colmo, ¡no veo algo tan esencial como es la fecha de eliminación! Y ni hablamos de configurar la papelera de modos distintos para los distintos discos (creo que es importantísimo en las unidades extraíbles).

Una vez, me dio por probar la integridad de los discos, la utilidad de discos encontró un problema en el disco de sistema y me vino a decir algo así como “búscate la vida para arrancar con el CD de instalación, vuelve a ejecutar la utilidad de discos, y que arregle el marrón” (no fue textualmente así, pero…)  ¿No se supone que el Mac es tan fácil de usar?  ¿Por qué no se arregla él solo en el siguiente arranque como cuando pasa lo mismo en Windows?

No todo es malo, claro, el rendimiento parece bueno, el uso del disco se nota más racional que con Windows, y la “no obligación” de tener instalado un antivirus (poca gente se molesta en hacer virus para menos del 10% de los ordenadores) evita un lastre muy grande en el rendimiento que sí padeces con Windows (si no quieres jugártela). Las nuevas “pilas” en Mac también son algo muy agradable, aunque tampoco es para tirar cohetes.

Resumiendo: tanto Snow Leopard como Windows 7 (los dos sistemas comparables), tienen sus ventajas y sus desventajas, y es difícil decantarse por uno u otro. Ambas son buenas opciones, y al final, lo que importa es el software, no el sistema operativo, no?

A favor de Mac “Snow Leopard”                        En contra de Mac “Snow Leopard”
Entorno visualmente agradable                                 Dependencia del ratón
Pocas amenazas (virus, etc.)                                 Menos software que en Windows
Sencillez de uso                                                        El Finder tiene con muchas lagunas
Buen uso del disco                                                Mala gestión de la papelera
Hardware con una estética impecable                Equipos excesivamente caros 


A favor de Windows 7                                             En contra de Windows 7
Gran variedad de software disponible.                   Muchas amenazas externas
Entorno visualmente agradable y productivo          Dependencia de un buen antivirus
Sencillez de uso                                                          Mala gestión del disco
Compatible con todo el hardware de PC                  Los drivers no son muy estables                                                                 


En mi opinión, lo mejor de Mac es que no necesita antivirus, pero prefiero el interfaz de usuario y el software que hay en Windows. Una buena opción, aunque un poquito engorrosa, es montarte un Mac con Windows 7 integrado con VMWare Fusion, así tienes lo mejor de los 2 sistemas, aunque a costa de algo de rendimiento.


No hay comentarios:

Publicar un comentario